20110912

Granja del abuelo.

Siempre estoy atento y no miro sin preocupación las cosas, pero hay momentos en los que de repente llegas a una calle vacía y de bajada, con arboles y sombra, y ahí ruedas sin pedos, ruedas felizmente y nada más importa y hablas contigo, y es personal y solo están los ruidos que hace tu bicicleta, sus mecanismos engrasados y el contacto con el asfalto y tus pensamientos suenan rápido, ese momento es la mejor soledad, la soledad ciclista.

La calle es un lugar hostil, todos los ruidos son feos y hace calor de esmoc, gente horrible y comida poco sana, basura, animales muertos, personas vivas muertas por dentro, mierda, sangre, balas, muertos y todo lo demás, y no me importaba, soy feliz con muy poco y era feliz con mi bici.

Me la robaron y ya, qué más?

Las decepciones humanas te hacen preguntarte "qué pedo?" en muchos aspectos, me queda alejarme de las drogas y de las fiestas y dedicarme más al arte, he tomado una decisión a base de odio a la gente. Después de terminar proyectos y pendientes comerciales me vuelco a vender las piezas que me tengo, ganarme dinero e irme a vivir a la granja abandonada de mi abuelo, vete a la mierda ciudad.

20110901

Flores.



El día que decidí dejarlo atrás todo y suicidarme me acordé que todavía tenía dinero
guardado y que tenía que gastármelo, eso pasó hace cinco meses y ahora no tengo dinero pero tampoco ganas de quitarme la vida, equis.

Por suerte nunca he conocido a nadie que me atore el habla a la mitad de la garganta y que me haya hecho suspirar, por suerte he conocido muchas de ellas y nadie me ha hecho caso. Buscando dentro de mi encontré ganas bobas y cierto clamor de alguno de mis órganos internos por relacionarme, por buscar besos fuertes y tronados, andar en bicicleta hablando todo el tiempo y quedarnos sin aliento antes de tiempo, pasear por las comisuras de los labios y jugar a que no tenemos nada.

Siempre juego a no tener nada, me sale tan bien que termino con abrazos vacíos, me sale tan bien que vivo solo, hablando con mi cabeza y temiendo que las respuestas que me da sean verdaderas, puras pinches pendejadas siempre.

Las cosas son fáciles, el asunto es mantenerse creando cosas en la vida real y dejar el resto para los muertos, ellos tan afortunados.